Sus investigadores han desarrollado un pasmosamente hábil brazo robótico, equipado con tres dedos capaces de cerrarse a nada más y nada menos que 10 veces por segundo. Esto le permite matar hábilmente las horas con una pelota de goma, mover una varita cual majorette nipona, e incluso jugar al béisbol con una precisión que a buen seguro te dejará (como a nosotros) con la quijada en el suelo.
Vídeos tras el salto.
Fuente: Engadget
0 comentarios:
Publicar un comentario